Me dirijo a Colegios de Ingenieros y son como las 5 de la tarde, it's that time when people squeeze, push, and fight their way in y éso les parece malditamente gracioso porque no dejan de reirse como idiotas mientras aplastan a la pobre vieja que va en el vagón, fuckers...
The whole point is, que estoy parado al lado de una de las puertas del vagón y en Chacaito se monta una gordita tetona y se queda parada frente a la puerta. Cuando llegamos a Sabana Grande se monta el típico malandro que trabaja de vigilante en un banco, con su bigotico, y barriga cervecera. PERFECT MATCH! He aquí el diálogo que me tocó escuchar:
- Chamo, aquí no cabes, no empujes!
- Claro que sí quepo. Mira, aquí pegaíto de ti... (mientras se acerca obsenamente a la gordis)
- Qué éxito! (sonriendo como 15ñera a punto de ser cogida)
- Yo te dije que iba a entrar... Ves? Bien rico aquí contigo. (con la cabeza ladeada hacia ella)
- Hahaha, qué fino, no?
- Mira, ya me tienes todo exitao' y to'
- (inaudible)
Bam, lata y lata en el vagón...
(llegamos a Plaza Venezuela)
- Quisiera quedarme, pero me quedo en Plaza Venezuela
- ...
(Se abren las puertas del vagón y ella sale mientras él se tapa la tiendita que tiene en el pantalón)
Yo no hacía sino morderme la lengua para no reirme por todo el showcito.
Pero quién lo diría, ahora el metro sirve para encontrar novi@, o por lo menos darte los besos con algún(a) fe@ de tu target, darling.
I'm out (of kisses)!
P.S.: Pero por lo menos pídele el número a tu metro hook-up, no hagas como el tonto ese que ni le preguntó el nombre.